Desde hace años, he convertido en tradición elegir una palabra que será mi brújula personal durante los 365 días que vienen. Como un ritual de año nuevo, me tomo el tiempo para reflexionar, sentir y dejar que emerja la palabra que resonará con mi viaje interno. Este 2025 llegó de una manera inesperada: a través de un calendario que nos regaló mi hija, recordándome que la inspiración puede surgir en el lugar más impensado cuando mantenemos el corazón y los sentidos abiertos.
Más allá del agradecimiento
Durante mucho tiempo, la práctica de la gratitud ha sido un pilar en mi vida. Agradecer por
- las personas que me rodean,
- las oportunidades que se me presentan y
- las experiencias que vivo
- (…)
ha enriquecido mi perspectiva y me ha ayudado a mantener una actitud positiva. Sin embargo, este año he descubierto que hay algo más allá del agradecimiento: la celebración.
Mientras que agradecer me conecta con el mundo exterior, celebrar me invita a mirar hacia adentro. Es un acto de reconocimiento propio, una fiesta íntima donde honrar mis logros, grandes y pequeños, y me permite sentir alegría por quien estoy siendo y lo que he alcanzado.
La danza entre agradecer y celebrar
He descubierto que combinar estas dos prácticas crea una sinergia poderosa:
- Identificar lo que agradezco: Continúo reconociendo las bendiciones externas, las personas y situaciones que enriquecen mi vida.
- Elegir qué celebrar: Ahora, doy un paso más allá y me pregunto: “¿Qué logro personal, por pequeño que sea, merece ser celebrado hoy?”
Esta combinación me ha permitido cultivar una apreciación más profunda tanto del mundo que me rodea como de mi propio crecimiento y esfuerzo.
Un motivo de celebración
Hoy, quiero compartir con vosotras algo que celebro con especial alegría: desde septiembre de 2024, he mantenido mi compromiso de compartir un vídeo semanal con mi maravillosa comunidad. Lo que comenzó como un desafío personal se ha convertido en una fuente de conexión y crecimiento mutuo.
Lo celebro no desde un lugar de obligación, sino desde la alegría genuina de poder contribuir y conectar con cada una de las personas de mi comunidad, semana tras semana. Cada vídeo representa no solo contenido compartido, sino momentos de reflexión, aprendizaje y comunidad.
Tu turno de brillar
Ahora, te invito a que te unas a esta práctica de celebración:
- ¿Qué logro personal, por pequeño que parezca, merece que celebres hoy?
- ¿Cómo puedes honrar tus esfuerzos y crecimiento de una manera que resuene contigo?
- Si tuvieras que elegir una palabra guía para este 2025, ¿cuál sería y por qué?
Recuerda, celebrar no se trata de presumir o compararse con otros. Es un acto íntimo de reconocimiento propio, una forma de nutrir nuestra autoestima y motivación intrínseca.
¿Cuál será tu palabra para 2025?
Al embarcarnos en este nuevo año, te invito a un ejercicio transformador: elige tu palabra para 2025.
Busca un momento de quietud. Cierra los ojos, respira profundo y pregúntate:
- ¿Qué necesito cultivar este año?
- ¿Qué palabra podría ser mi brújula interior?
- ¿Qué energía quiero invocar en mi vida?
Puede ser “valentía”, “conexión”, “fluir”, “crecer”, “paz”… No hay palabras correctas o incorrectas. Solo la que resuene con tu viaje personal.
Una vez que encuentres tu palabra, escríbela. Ponla en un lugar visible. Déjala habitar en ti. Que sea tu compañera de aventura en este 2025.

(y más cosas que voy a compartir contigo)